El día de hoy camino a la escuela, me tope con esta canción en la radio, que es muy conocida (supongo que la mayoría alguna la vez la ha escuchado); y se me hizo muy curioso porque nunca le había prestado la atención debida; por lo que empece a enfocarme en la letra e intenté reflexionarla. Y me di cuenta de que lo que está canción trata de decir es que muchas veces el ser humano empieza a tomar en cuenta todo lo que lo rodea y se deja llevar por su entorno, y la mayoría del tiempo esto sucede cuando uno deja de ver lo bueno, de ver lo positivo y empieza a importarle el que dirán y dejan de hacer las cosas como creen ellos mismos que deben hacerlo y hacen caso a los demás. Empiezan a seguir una rutina, algo estereotipado, que sin lugar a dudas, no los lleva a ser realmente como son y suelen deprimirse, ser infelices y estar enojados con el mundo que los rodea. Cuando realmente lo que nos debe importar siempre es uno mismo; no lo digo en una forma egoísta pero si en una saludable; ya que cuando uno tiene paz interior y su espíritu está estable, vivir en armonía, en serenidad, sin stress y no viviendo fuera de nosotros mismos. Al momento de profundizar con uno mismo estamos siendo nuestro verdadero yo, cuando yo entro en mí mismo, me encuentro con los demás desde la verdad de lo que realmente soy, y puedo descubrir al otro como ser humano. Por eso los invito a que crean en ustedes, a que tengan sus ideas, mediten y no teman lo que digan los demás; aquí lo único que importa es mi bienestar y mientras no afecte a los demás pueden seguir adelante. Y me despido con esta frase: La felicidad se alcanza cuando lo que uno piensa, lo que uno dice y lo que uno hace están en armonía.-Gandhi.
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